· Minimizó el reclamo de un pequeño grupo de simpatizantes de Arturo Fernández.
La protesta que un reducido grupo de simpatizantes o seguidores del suspendido alcalde de Trujillo, Arturo Fernández, hizo ayer en la plaza de armas, frente a Palacio Municipal, fue minimizada por el burgomaestre en funciones Mario Reyna Rodríguez.
“La protesta de la población es un derecho establecido en la Constitución, siempre que se haga respetando las normas. Cualquier contravención debe ser tratada como tal”, manifestó.
Aunque indicó que por haber estado participando en una sesión del Comité Distrital de Seguridad Ciudadana (Codisec) del distrito de Alto Trujillo, no había leído la resolución del Jurado Nacional de Elecciones donde se precisaba que el año de suspensión en el cargo de Fernández es hasta el 9 de enero de 2025, iba a ser respetuoso de los diga el organismo electoral y que mientras tanto seguiría trabajando en la recuperación de la ciudad.
Respecto a la protesta indicó que si alguna persona quiere reclamar crucificándose, es su derecho, pero que no lo hagan de “mentiritas”. Esta es una payasada más. Es más circo al que nos tienen acostumbrados sus seguidores, señaló.
Estamos en un estado de derecho y en democracia. Las autoridades ejercen el rol de ordenar las cosas evitando que una persona mal intencionada pretenda distorsionar información y confundir a la población, indicó.
“Hay muchos pillos que se aprovechan del desconocimiento de la población para vender humo o cebo de culebra. De eso está llena la política. Sin embargo, hay que tener fe en las autoridades y en las leyes”, recalcó.
La autoridad reiteró que seguirá al frente de la alcaldía hasta que el JNE lo disponga. Vamos a continuar con mucha fe en que seguiremos avanzando en la recuperación de la ciudad ese es el aporte que quiero hacer, enfatizó finalmente..
