- Preparar a los niños para una vida plena y exitosa implica invertir
en su capacidad de expresarse con claridad y fluidez.
En un mundo cada vez más interconectado
y orientado hacia la comunicación, la habilidad de expresarse con claridad y
fluidez se ha vuelto indispensable. Sin embargo, debido a la educación a
distancia, muchos niños han enfrentado dificultades para conversar y compartir
ideas con otras personas.
En 2020, los representantes del Minsa
señalaron que el confinamiento tuvo un impacto negativo en el desarrollo del
lenguaje de los niños. Aquellos que ya presentaban dificultades en el lenguaje
vieron interrumpido su progreso, mientras que aquellos sin problemas previos
experimentaron limitaciones en su interacción social, lo que resultó en un
menor crecimiento de su vocabulario y habilidades comunicativas.
Por ese motivo, los especialistas de
Ediciones Corefo brindan cinco recomendaciones para promover la conciencia del
propio lenguaje, su uso en diferentes situaciones y ejercicios para ampliar el
vocabulario de los niños. Estas recomendaciones pueden ser aplicadas tanto en
la escuela, a través de actividades específicas, como en el entorno familiar:
- Fomentar
la escucha activa. Esto no solo ayudará a los niños a comprender
mejor a los demás, sino que también les permitirá aprender desde
diferentes perspectivas y enriquecer su propio lenguaje. Algunas técnicas
y juegos para desarrollar la escucha activa incluyen aprender a respetar
los turnos, evitar distracciones, no juzgar a los demás, buscar el
contacto visual, colocarse a la misma altura, tener en cuenta las
expresiones y el lenguaje no verbal de los demás, no restar importancia a
lo que nos quieren contar y mostrar empatía. - Practicar
la expresión oral. Anima a tu hijo a participar en conversaciones
diarias en casa, brindándole la oportunidad de expresar sus pensamientos y
opiniones. Alentándolo a hablar en voz alta, ganará confianza en su
capacidad para comunicarse y desarrollará habilidades de articulación. - Leer
y discutir juntos. La lectura en familia es una excelente manera
de mejorar la fluidez verbal. Estudios confirman la alta correlación (0,6
a 0,8) entre el conocimiento del vocabulario y la comprensión lectora.
Cuantas más palabras y expresiones conozca el estudiante, mayor será su
riqueza léxica. Después de leer un libro o un artículo interesante, tómate
el tiempo para discutirlo con tu hijo, animándolo a expresar sus ideas y
argumentar sus puntos de vista. - Actividades
lúdicas. Introduce juegos que estimulen el pensamiento creativo y la
expresión verbal, como adivinanzas, trabalenguas, juegos de palabras,
historias improvisadas, teatro o dramatizaciones, juego de roles, pintura
y dibujo narrativo, rompecabezas y charlas temáticas, entre otros. Estas
actividades no solo son divertidas, sino que también ayudan a los niños a
desarrollar habilidades lingüísticas y a expresarse con mayor fluidez.
Recuerda adaptar las actividades a la edad y nivel de desarrollo de los
niños para asegurar que sean apropiadas y desafiantes a la vez. - Modelar una comunicación efectiva. Los
niños aprenden observando a los adultos que los rodean. Asegúrate de ser
un modelo de comunicación efectiva, utilizando un lenguaje claro y
coherente, y brindando ejemplos de cómo expresar ideas con claridad y
respeto.
Los expertos señalan que enseñar a los
niños a expresarse con claridad y fluidez es una inversión valiosa en su
futuro. Al proporcionarles las herramientas y oportunidades necesarias para
desarrollar estas habilidades, los estaremos preparando para una vida plena y
exitosa.