
· Exige mayor labor de inteligencia para desarticular a las bandas organizadas.
El alcalde provincial Mario Reyna Rodríguez señaló que la necesidad de más policías en las calles de Trujillo, es un sentir popular. “Como autoridad, mi chamba es reclamar por la comunidad, tengo que ser crítico, reclamar por ellos y lo que piden ahora es más presencia policial en las calles”, enfatizó.
Por ello insistió en que se refuerce la dotación policial, lo que podría ocurrir haciendo quedar aquí a la promoción de estudiantes que egrese este año de la Escuela de Educación Superior Técnico Profesional PNP Trujillo. “Hay ciudades en el país que tienen mayor cantidad de policías en relación a su población y no tienen los mismos problemas”, expresó.
No podíamos seguir de estado de emergencia en estado de emergencia si no se daba el equipamiento. Ahora que la Policía Nacional está mejor equipada lo que falta es mucha labor de inteligencia policial y debe de sentirse su accionar, dijo.
La autoridad sugirió enfocarse en cortar las líneas de trabajo de las organizaciones criminales o bandas organizadas, por ejemplo, en lo fácil que es acceder a chips y equipos celulares. El Congreso debería poner mano dura, pero no quiere legislar sobre esto y le tira la pelota a la PNP, criticó.
Respecto a la posibilidad de que desaparezca el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), como lo anunció el presidente de la República, José Jerí, precisó que no importa que le cambien de nombre o que desaparezca. Lo que importa es que funcione.
Es un chiste de mal gusto que en el Estado peruano sigan vendiendo chips libremente, sin control. Las empresas de telefonía deben también ser responsables. ¿Si no podemos con eso qué podemos esperar en esta lucha? preguntó.
Lo veníamos diciendo: las cárceles siguen siendo patios de recreo. No funcionan los arcos detectores de rayos x, tampoco los escáneres y las drogas, chip y celulares siguen entrando. Lo peor es que siguen sin funcionar los bloqueadores de llamadas y eso permite que continúen extorsionando.
Reyna señaló, sin embargo, que las estadísticas en el distrito de Trujillo respecto al crimen siguen mejorando. El año 2023 recibimos una ciudad con 43 muertes violentas, el año pasado hubo 21, es decir se redujo los homicidios en más del 50%, y en el 2025, a noviembre estamos en 11. Después de ocho años Trujillo volvió a colocarse por debajo de la media nacional en el ranking de criminalidad.
“Ya quisiéramos que no haya homicidios”, enfatizó, reiterando que este año la Policía Nacional ha mejorado su equipamiento y logística al contar con una Central 105, camionetas patrulleras, motocicletas, drones, está en construcción el laboratorio de criminalística y la ciudad tendrá 300 nuevas cámaras de videovigilancia.